Rachid Niny
Confesiones, edición bilingüe (español / árabe)
Traducción de Khalid Raissuni
Madrid: Diwan Mayrit, 2022
ISBN: 979-13-87507-04-6, 12€, 148 pp.
«Que el amor nos salve de la vida»
De un estilo caracterizado por el lenguaje brutalmente directo y personal que desnuda la intimidad del poeta en búsqueda de la verdad de la existencia, la poesía confesional quizás vivió su mayor auge durante las décadas de los años 50 a los 70 del siglo XX. Heredera indirecta de las Confesiones de Jean Jacques Rousseau (y las más antiguas de Agustín de Hipona), la modalidad de la poesía confesional coloca al lector en el papel de quien, en su capacidad de oyente, recibe la confesión del poeta, creando así un espacio de interioridad compartida que conduce hacia la revelación de algo previamente oculto, tanto para el poeta como para el lector. Independientemente del tipo de la confesión encerrada en el texto (religiosa, autobiográfica, psicoanalítica, policial, etc.), su principal motivación es forense: demarcar el espacio de lo que Jürgen Habermas llama «la esfera pública», el espacio discursivo donde «los ciudadanos se ocupan de los temas de interés general sin ser coaccionados» y por lo tanto, se abre a la libertad de los participantes para pensar y expresarse.
A pesar de que la poesía estrictamente confesional —que no intimista— fue dejada a un lado, hay críticos que sugieren un momento de «posconfesionalismo» poético en el siglo XXI dada la influencia de la cultura digital. Rachid Niny, el galardonado escritor y periodista marroquí, retoma la confesión como modalidad poética a lo largo de Confesiones (Diwan Mayrit, 2022), un poemario que podría enmarcarse en el actual momento posconfesional a la vez que hace eco de clásicos desde Ibn Arabi hasta Neruda. La cuidada edición bilingüe en árabe y en español, prologada por el poeta y académico granadino Pedro Enríquez, celebra la esfera pública en dos idiomas y la traducción a cargo del poeta Khalid Raissuni. Confesiones se suma a la premiada labor periodística y literaria de Niny. Como periodista, Niny ha sido reconocido por Oxfam y PEN y reconocido por Amnesty International, que logró su libertad en 2012 después que fuera encarcelado por sus artículos sobre la Primavera Árabe en 2011. Asimismo, el poeta, escritor y periodista ha fundado varios periódicos y actualmente dirige una cadena de televisión en Marruecos. La memoria Diario de un ilegal (Ediciones de Oriente y el Mediterráneo, 2002), que relata la vida de Niny como inmigrante en España durante tres años, se ha convertido un referente de la literatura de migración y su obra ha sido traducida al español, inglés, francés e italiano.

El encuentro con la otredad es un tema central en la obra de Niny, y en Confesiones, sucede en el espacio del amor / desamor evocado famosamente en Los veinte poemas de amor y una canción desesperada de Pablo Neruda, a quien Niny cita en el epígrafe del libro: «Si nada nos salva de la muerte, al menos que el amor nos salve de la vida». El poeta no sólo cuenta su extremo sufrimiento ante la pérdida de la amada, sino que también intenta comprender cómo ha sucedido el rompimiento de la relación y la naturaleza del amor, que lo lleva a convertirse en un «lobo disfrazado». Al final de Confesiones, tanto poeta como lector han adquirido la sabiduría de la experiencia, como el galán al final de «La balada del viejo marinero» de Samuel Taylor Coleridge, quien alcanza cierto grado de absolución después de su confesión.
La meta salvífica del texto de Confesiones se anuncia desde la primera «confesión», donde el poeta aparece como un enfermo —«un adicto»— y el amor como un padecimiento: «Me proporcionaré la necesaria inmunidad / para que mi corazón no sea infectado / con la epidemia del amor fugaz» (p. 13). Aunque la concepción del amor como enfermedad o locura tiene una larga tradición en la cultura popular y la historia de la literatura universal, una de las características destacadas de la poesía de Niny dar a este conocido topos literario un giro original: el poeta no es sólo quien padece y se queja de esta aflicción, sino también quien lo diagnostica y tiene el poder de atender sus males, «porque el que vuelve del amor / es como quien retorna de una guerra / de la que vuelve con vida, pero en la que lo perdió todo» («5», p. 21).
El sufrimiento del poeta ante la inexplicable ausencia de la amada, cuya indiferencia se vive como crueldad, ocupa el planteamiento de la primera parte del libro. El uso de la segunda persona resalta la intensidad emocional de la confesión del poeta, la cual se plasma en poemas de distintas formas y longitudes. Versos como «Por ti, / intenté suicidarme reiteradamente / ante la ventana. / Desgraciadamente no logré morir / salvo pocas veces» («11», p. 45), o la declaración directa que se convierte casi en denuncia, «Casi me muero por tu culpa» («12», p.47) convierten al lector en un testigo de la pasión del poeta. Detalles íntimos y cotidianos de la vida de la pareja, como por ejemplo, «no aceptarás / que yo crie un gato en casa / y porque yo no permitiré los utensilios de cocina / sobre el estante al lado de mis libros» («13», p. 59 ) destacan el carácter indagador de las Confesiones de Niny respecto a la desaparición del amor entre dos seres que alguna vez se amaron.
Mas este cuestionamiento lleva al poeta a enfrentarse a la naturaleza del amor, que es a la vez «niño hermoso» y «fiera» («14», p. 61, 63). La actividad forense en la segunda mitad de Confesiones se centra en investigar —ya no a la amada como la culpable de la pena del poeta— sino al amor mismo. El poeta lo interpela también en segunda persona y repite la denuncia: «Oí que eres asesino / desleal y despiadado / … compras y vendes a los corazones heridos» («15», p. 69). La definición, sin embargo, se escapa del poeta con la misma fugacidad que la presencia de la amada perdida. A través de Confesiones, Niny explora el carácter contradictorio del amor, a la vez «lobo depredador» («17», p. 75) y «el río / en que sumerges tus pies / para que los lobos humanos te pierdan de pista» («36», p. 129). Esta aporía, no obstante, abre la puerta al autoconocimiento, y el poeta reconoce que él también puede convertirse en la causa de un desencanto. Hablando a una amante futura, escribe: «En vano sería esperarme en tus sueños. / En vano sería que llores por mí.» («30», p. 107).
La capacidad de sincerarse con uno mismo frente a los misterios de la vida, como lo son el amor y la muerte, sea tal vez una de las lecciones más importantes de Confesiones. En una época cuando la influencia de las redes sociales y los reality hablan de una sed insaciable y de morbo respecto a la vida de los demás, la necesidad primordial de conocerse a uno mismo se pierde. Las Confesiones de Rachid Nini demuestran que este conocimiento es fundamental para que no naufrague el encuentro con el Otro, sea en el amor o en un poema. El poeta termina su confesión con preguntas sobre la fuerza ancestral de Eros como «¿Quién compromete a su corazón por él / anhelando un amor imposible?». Tal vez no haya respuesta, pero lo importante es hacerlas juntos.
Joselyn Michelle Almeida
Madrid, 2025

















