por Joselyn Michelle Almeida
Revista Banipal comienza su quinto número con un homenaje al gran poeta iraquí Saadi Youssef (1934-2021), uno de los más innovadores y destacados de su generación. En la primavera del 2000, Banipal en inglés dedicó un número especial a su obra, y en 2014, publicó un dossier para celebrar los ochenta años del poeta. Margaret Obank, la directora ejecutiva de Banipal, recuerda en su ensayo acerca del escritor y querido amigo: «Conocí a Saadi por primera vez en 1999 en el Reino Unido, e inmediatamente me impresionó su internacionalismo: en su literatura, su vida diaria, y en su propia obra y traducciones mostraba una curiosidad extraordinaria por otras literaturas y escritores para aprender de ellos. Siempre se consideró “un ciudadano del mundo”, rechazando la idea del exilio, aunque vivió la mayor parte de su vida fuera de Iraq».
La poética de Youssef «se distingue hasta hoy por la atención especial que presta a los sucesos de la vida diaria y a la realidad material que nos rodea» escribe el traductor y crítico alemán Stefan Weidner. Esta sensibilidad lo convierte en un «padre poético» de los poetas árabes contemporáneos por su estilo, uno en el que «el mundo físico se encuentra con la metafísica, el folclore se mezcla con el heroísmo, la épica con los himnos, y la narrativa con la rima y el arabesco. Al mismo tiempo, su poesía se nutre del arte y la música popular, el cine, y la actualidad. Las ciudades árabes y los desiertos se vislumbran en sus versos y se mezclan con las arenas de la antigüedad árabe» como señala el crítico Abbas Beydoun. El poeta y traductor Jaafar al Aluni añade: «Cuando un poeta muere, algo que dormía en el mundo se despierta… Hay poetas que enriquecen el mundo, amplían la realidad, abren el ojo del huracán y nos hacen parte de su torbellino… Saadi Youssef es uno de esos poetas que ha inventado lo que no existe, ha transformado el mundo».
La interconexión entre la escritura, la vida y su ausencia es también motivo de reflexión para la novelista egipcia Mansoura Ez-Eldin, quien, hablando de sus antecedentes literarios, narra como la muerte de su padre a los nueve años se convierte en un suceso que marcó su formación como escritora. Ez-Eldin observa: «Me puse a tramar en la imaginación escenarios que devolvieran mi padre a la vida. Fue así como escritura e imaginación quedaron para mí unidas a la idea de la inexorabilidad de la muerte y al desafío que ella representa». La imaginación literaria de Ez-Eldin se nutre de varias fuentes de la literatura egipcia y universal, desde los relatos detectivescos de Agatha Christie y Arthur Conan Doyle hasta escritores más contemporáneos como Naguib Mahfuz, Mohamed el-Bisatie, Dostoyevsky, Camus, Gabriel García Márquez, Toni Morrison, Virginia Woolf, y Knut Hamsun. Mas en Shahrazad Ez-Eldin encuentra el arquetipo de la escritora o el escritor: «Unos y otra comparten el mismo propósito, el deseo de influir en el hipotético Shahriar que es el lector y seducirle. La escritura es, en parte, seducción».
La obra de los poetas en este número, Girgis Shukry, Najwan Darwish, y Khaled Mattawa también responde a la contienda entre las fuerzas de Eros y Tánatos a la que apunta la reflexión de Mansoura Ez-Eldin. En la serie «Si yo fuera noche», el poeta egipcio Girgis Shukry explora el enfrentamiento cotidiano con la muerte que la guerra trae consigo y que estructura lo que la humanidad recibe como historia. La unión de lo diario y lo histórico en la poética de Shukry produce imágenes que capturan aporías existenciales: «Por causas concernientes a la Historia / el cuchillo huyó de la casa / y degolló a quien no conocía». La lograda traducción de Maria Luisa Prieto comunica la voz del poeta ante la inquietud despertada por el desconcierto del mundo y la apatía ante este.
Como apunta Jaafar al Aluni en su presentación del poeta palestino Najwan Darwish, «La poesía de Najwan Darwish revela la energía, la vitalidad y la creatividad de la lengua árabe, porque se basa en una práctica intelectual y artística cimentada en la libertad absoluta y el conocimiento humano en su máxima expresión, más allá de las ideologías y las creencias políticas». La excelente traducción de al Aluni de poemas del libro Clavados en el aire (2018) comunica la profundidad de los poemas de Darwish, que llevan al lector a sentir la vulnerabilidad de la vida y de la belleza en medio de la guerra a través de imágenes y símbolos de la naturaleza que comunican simultáneamente la belleza, el peligro y la negación como en «Un amanecer afilado»: «El amanecer desenvainado de Dios / acecha como una espada de hoja estrecha y afilada / con su vaina de tinieblas». En «Elegía para un niño dormido», el poeta recurre a una imagen natural para intensificar el sentimiento de protección ante el niño que duerme bajo la realidad despiadada de la guerra: «Hijo mío, / de la memoria de los asesinados llego, / de la memoria incapaz de distinguir entre un niño dormido / y otro asesinado». Darwish plasma la precariedad de la condición humana y a la vez, su irreprimible voluntad de lucha: «Escribe tu frase en el cuaderno del alba». El poeta Trino Cruz señala acerca de la nueva antología de Darwish, Exhausted on the Cross: «En palabras de Raúl Zurita, el gran poeta chileno que prologa la edición del libro, “sobre todo la poesía es solidaridad y compasión por cada detalle del mundo”».
La vulnerabilidad de la vida adquiere una dimensión transnacional en la poesía de Khaled Mattawa, un poeta araboamericano que vincula localidades como Detroit y Tripoli, Lesbos y Nimroz en una travesía que acerca el lector a la realidad de los migrantes desposeídos por la guerra, y emprende la búsqueda de una respuesta ética ante las múltiples catástrofes humanitarias y ecológicas que asedian al planeta en Atlas fugitivo [Fugitive Atlas], ganador del Premio MacArthur en 2014. Entre las varias formas poéticas que Mattawa utiliza a lo largo del poemario, introduce el haibún japonés, una meditación en prosa que termina en un renga, un poema corto. Esta estructura subraya la urgencia de la crisis migratoria, como en el poema «Fuego en el mar: canto fúnebre», donde el poeta narra «una tragedia en el mar que sucedió el 3 de octubre en 2013 a orillas de la isla italiana de Lampedusa … de 500 pasajeros, solo 155 fueron rescatados». Mattawa concluye el haibún con la pregunta que hizo el guardacosta a la embarcación repetidas veces, una «que abarca todas las facetas de lo que ha llegado a denominarse la crisis de los refugiados: ¿Cuál es su situación? / ¿Cuál es su situación ahora? / Su situación, por favor». Ante la urgencia personal y global de la crisis, Mattawa destaca la responsabilidad que tenemos para mitigar el sufrimiento del Otro con formas líricas clásicas como el salmo y la qasida, las cuales transmiten la vitalidad urgente del nexo imaginativo que Mattawa logra entre las tradiciones de Oriente y Occidente, representado en la traducción expresiva de la poeta Joselyn Michelle Almeida.
El relato está representado por los cuentos de Sultán al-Ameemi, quien ha publicado más de 19 libros, y como señala la crítica Katia al-Tawil, es un maestro de la ficción abismada, «una técnica de escritura que consiste en que el autor cuenta en su historia cómo elabora su relato». La genialidad y el humor casi absurdo de las situaciones en sus cuentos recuerdan grandes autores experimentales de la literatura universal como Nikolai Gogol, Luigi Pirandello y Juan Carlos Onetti. Al mismo tiempo, los cuentos de al-Ameemi en la cautivadora traducción de Maribel González Martínez, revelan el gran desconcierto que sus personajes experimentan, bien sea mientras buscan una aldea que no existe, se despierten embarazados con semillas de melón, o intenten escapar al destino que su autor les ha designado. Lo absurdo mezclado con lo sublime también aparece de manera evocativa en los cuentos de Hassan Abdel Mawgoud y Sheikha Helawy.
En el género de la novela, el quinto número de Revista Banipal presenta a varios escritores reconocidos por sus obras y a escritores emergentes. La novelista sursudanesa Stella Gaitano, autora de Los espíritus de Eddo, obtuvo el Premio PEN en 2020. Los espíritus de Eddo narra la historia terrible de Eddo, una madre y mujer extraordinaria que sufre la pérdida de diez hijos antes del nacimiento de su última niña, a quien da el desagradable nombre Iguino como talismán contra la muerte y abandona a la crianza de los vecinos en la aldea. Una crisis la obliga a superar su sufrimiento anterior y a cuidar de Iguino, rebautizada Lucy, a la vez que su fuerza vital la convierte en consejera y protectora de otras mujeres, especialmente de Marta, quien sufre violencia de género a diario por no concebir un niño. Cuando Marta duda de poner en práctica el consejo de Eddo para detener las palizas de su marido por las habladurías de los vecinos, Eddo le responde «¿Tú crees que estás a salvo del qué dirán? La gente hablará de todas formas, ¿por qué no le cambiamos el tema de conversación y los dirigimos a temas más curiosos e interesantes?». La excelente traducción de Pilar Garrido Clemente nos acerca a la vitalidad, la sabiduría y el espíritu de lucha de esta memorable protagonista.
La mirada femenina sobre la historia es también el tema de Lina Hawyan al-Hassan en la novela Damas y aljófares, hábilmente traducida por Hala Nesly, una novela que conecta los mundos de Siria, París, y São Paulo. «Es una novela que mezcla lo histórico y lo literario con el objetivo de mostrar cómo eran las mujeres orientales en general, y las sirias en particular …. a la hora de ejercer trabajos profesionales y comerciales, que, paradójicamente, hoy en día son en su mayoría dominio exclusivo de los hombres».
Las consecuencias de la migración y el exilio emergen en las novelas del autor argelino Saïd Khatibi, Leña de Sarajevo, publicada en 2018, y Dormir en un campo de cerezos, del autor iraquí Azher Jirjees, publicada en 2020. Los protagonistas de Leña de Sarajevo, Ivana y Salim, huyen a de la guerra civil en sus respectivos países, Bosnia y Argelia, y se proponen forjar una nueva vida en Sarajevo. La estupenda traducción del reconocido arabista Ignacio Gutiérrez de Terán permite al lector entrever los procesos interiores y el cúmulo de circunstancias opresivas que impulsan a Ivana y Salim a tomar una decisión fatídica. Ivana se da cuenta que «en un lugar tan poco normal como este», su proyecto de vida «parece una quimera», y parte antes de sucumbir al alcoholismo y la desesperación de un entorno familiar hostil. Mientras tanto, en Argelia, la censura política y las amenazas a los jóvenes por parte de «los espantapájaros» —como los llama Salim—hacen que su vida peligre y truncan su carrera periodística. Mediante un realismo postmoderno, Khatibi nos transporta a los contextos de Ivana y Salim, mostrando que cada uno habita la historia con mayúscula a la vez que la propia.
Cómo el exilio puede magnificar la carga histórica es el tema del Azher Jirjees en Dormir en un campo de cerezos, una novela ambientada en Noruega. Jirjees utiliza la figura del traductor como el narrador interno implicado en traducir el último relato de Said Jensen, un escritor iraquí asentado en Noruega. Said, como el Hamlet de Shakespeare, vive atormentado por el fantasma de su padre. «Apareció ante mí, cuando leí su reportaje, el cadáver de mi padre sobre su espalda en un pozo revelado por la luna». El lector descubre cómo los destinos de Said y el del traductor están vinculados por el refrán noruego que da título a la novela. La traducción vigorosa de la escritora Covadonga Baratech nos transporta a la odisea de Said en Bagdad para recuperar y enterrar los restos de su padre con la ayuda de Abir, una amiga periodista, y a la vez atender a las heridas psíquicas de la guerra, como la desaparición e injusta acusación de su amigo Yamal como «traidor».
Si bien la guerra está en el pasado de estos protagonistas, el escritor sudanés Abdelaziz Baráka Sakin nos lleva a su presente desgarrador en El mesías de Darfur, traducida al español por el galardonado arabista Salvador Peña Martín. La aclamada novela, la cual también se ha publicado en francés, inglés, y suajili, ha sido proscrita por el gobierno de Sudán por denunciar la guerra de Darfur en 2003. Además de la violencia desmedida de los yanyayuid y la corrupción del gobierno, Baráka Sakin aborda varios temas tabú a través de sus protagonistas como la violación de la mujer como arma de guerra, la esclavitud y la trata de personas en Sudán, y el genocidio. En los capítulos presentados, el mesías y sus seguidores son condenados a la crucifixión mientras el gobierno que los persigue obtiene reclutas a la fuerza. Dos soldados rasos, Shikiri e Ibrahím, se convierten en amigos; su amistad se pone a prueba cuando el gobierno ordena a Shikiri que espíe a Ibrahím.
Las últimas secciones presentan reseñas y anuncian los ganadores del Premio Sheikh Zayed del Libro, uno de los premios literarios internacionales más importantes en las categorías de literatura, literatura infantil, edición y tecnología, cultura árabe en otras lenguas, y traducción. Por último, la revista también recuerda a la poeta iraquí Lamia Abbás Amara (1929-2021), cuyo sentido poema «Cuando desapareces» se refleja en el cuadro elegíaco de la portada de la pintora iraquí Afifa Aleiby, Burning of the tower of Babylon [El incendio de la Torre de Babilonia] (2007). Frente a los retos cada vez mayores del Antropoceno, las voces en el quinto número de la Revista Banipal reivindican la persistencia de la palabra creadora y la lucha del ser humano por construir la bienaventuranza del mañana en comunidad.
Joselyn Michelle Almeida, PhD. es la autora del po-emario Condiciones para el vuelo (Libros del Mississippi, Madrid 2019) y de varios estudios y artículos de filología anglo-hispana. Cursó estudios clásicos y filología inglesa en Tufts University, y se doctoró en filosofía y letras de Boston College. Su experiencia profesional abarca el campo de la lengua y la literatura como docente e investigadora en la Universidad de Massachusetts Amherst y otras universidades estadounidenses, y como editora y traductora. Entre otras, ha sido becaria de la Fulbright y de la National Endowment for the Arts en EEUU.